Conmemorando los 50 años de la presencia jesuita en nuestra región, centenares de alumnos, ex alumnos, padres de familia, trabajadores y amigos del Colegio San Ignacio de Loyola, peregrinaron desde el sábado hacia la Basílica de Nuestra Señora de las Mercedes, en la ciudad de Paita, donde ayer se ofició una misa, recordando el cariño de los primeros jesuitas a esta virgen y renovando su compromiso, a los pies de Nuestra Señora, de seguir trabajando por “Hacer fecundo el desierto”. La misa fue concelebrada por los jesuitas Felipe de Benito, Eduardo Castillo y Miguel Cruzado Silveri, primer jesuita paiteño y ex alumno del San Ignacio, quien presidió la celebración, instando a los peregrinos y al pueblo de Paita reunido en la Basílica, a vivir con compromiso la vida cristiana, dijo Miguel. La peregrinación se realizó en homenaje a la Virgen de las Mercedes “Bajo cuyo manto sagrado, los primeros jesuitas se vieron acogidos por esta cálida tierra”. Nadie mejor para presidir esta celebración que un paiteño como Miguel Cruzado, quién descubrió su vocación de jesuita precisamente en el Colegio San Ignacio, a los pies de la Virgen. “Que alegría vernos todos reunidos, después del agotador recorrido que emprendimos ayer desde la ciudad de Piura. Hoy les hemos demostrado a los pesimistas, lo que somos capaces de hacer, cuando nos proponemos las cosas con esfuerzo y esperanza, y más aún, lo que somos capaces de hacer por nuestro padre Dios y nuestra madre, la Virgen María, a quienes los ignacianos agradecemos por su protección en este medio siglo, dijo el padre Miguel, quien fue interrumpido por los aplausos de los paiteños, emocionados por sus palabras.(Publicado en el Correo de Piura - 21 de abril 2008)
No hay comentarios:
Publicar un comentario